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lunes, 27 de septiembre de 2010

3º DE LA ESO: tema inicial, la medida y el método científico; sesión 1

Voy a ir desarrollando mediante una serie de entradas la forma en la que estoy explicando la Física y la Química para un nivel de 3º de la ESO. Será una forma de tener un registro diario de la evolución de la asignatura. De momento es un primer intento, ya que como comprenderéis, exige mucha dedicación. Espero que me hagáis sugerencias y que aportéis consejos, ya que ello me ayudará a la hora de mejorar la forma en que desarrollo la enseñanza de la asignatura.

En la sesión inicial lo ideal antes que nada es dejar claras las normas de conducta, la forma que se trabajará en clase, así como los criterios de calificación que se van a seguir.

En mi caso les indico que dispongo de una hoja de cálculo para el control diario de tareas y de actitudes y les explico cómo la utilizo: todos los días, al principio de la clase paso lista y miro de forma rápida los alumnos que han hecho las tareas, poniendo un 2 a quien las tiene, un 1 a quien se ha dejado algún ejercicio, y un 0 a quien no ha hecho la tarea. Tres días con las tareas por hacer suponen una amonestación y la consiguiente llamada telefónica a casa. Además, al final de la clase (los últimos 5 minutos, mientras ellos están haciendo algún ejercicio), pongo la nota de actitud, que también puede ser un 2 (buena actitud), un 1 (regular), o un 0 (mala actitud). Tres ceros suponen la consiguiente amonestación y comunicación a los padres (salvo algo muy grave, claro, lo que implicaría una amonestación directa así como seguir las medidas acordadas en el reglamento del centro).

Estas hojas de control me permiten saber la evolución de los alumnos en estos dos aspectos, la realización de tareas y la actitud. Cada uno de ellos contribuye en un 10% a la nota de la asignatura, mientras que las pruebas teóricas contribuyen en un 80 %. Suele ser un método muy efectivo, ya que los alumnos que hacen siempre las tareas y se portan bien en clase son los que sacan buenas notas. Además, ellos ven claramente la repercusión en la nota final de su actitud y su esfuerzo, y valoran que puedan alcanzar 2 puntos de la nota global sin depender de la nota de los exámenes.

La nota en cada uno de estos apartados la calculo en función del máximo posible de puntos. Por ejemplo, imaginad que hemos dado veinte clases en una evaluación. Alguien con actitud positiva en todas las clases tendrá cuarenta puntos, y eso supondrá la máxima nota en actitud, un 10, que contribuirá en 1 punto a la nota global de la evaluación. Una persona con 20 puntos, tendrá un 5 en actitud, y sólo sumará 0,5 puntos en el apartado de la actitud. Además, les indico claramente que una nota inferior a 5 en actitud implica suspender directamente la asignatura. Esto lo reflejo en la programación, y lo hago para evitar el caso de un alumno con muy mala actitud, que se dedicase a molestar en clase y luego aprobara los exámenes.

Por último les informo del sistema de recuperación. No hay exámenes de recuperación, porque en mi opinión, no sirven para nada, salvo para perder tres clases al año, que puedes utilizar en otras cosas mucho más interesantes. Lo que hago es sacar la media de las tres evaluaciones, de forma que el que tenga una nota superior o igual a 5 aprueba la asignatura.

Una vez explicado todo lo anterior les propongo que definan en la libreta lo que es para ellos la Física y la Química. Como podéis suponer las definiciones son bastante peregrinas. Les doy 5 minutos de tiempo, y luego comentamos brevemente las respuestas de unos cuantos alumnos.

A tenor de las respuestas nos damos cuenta de que los alumnos están completamente desorientados respecto de nuestra asignatura, ya que la ven como una cosa extraña, lejana, que tiene que ver poco con su vida diaria. Además, el enfoque que suele darse a las Ciencias Naturales en 1º y 2º de la ESO no ayuda en nada, ya que los departamentos de Física y Química acostumbran a implicarse poco en la docencia de estos dos primeros cursos, con lo que el resultado es el de siempre: apenas dan temas de Física y Química en el primer ciclo, y la Física y Química se convierte en el "coco", junto a las matemáticas.

A continuación les dicto la definición académica de Física y de Química, pero por supuesto no les exijo que las aprendan, ya que la definición es sumamente complicada. Lo que hacemos es analizar la definición superficialmente, para posteriormente poner ejemplos de fenómenos de la vida diaria que serán estudiados por una u otra ciencia. Estos ejemplos podrían ser:
Física: medida de la masa de un cuerpo, cambios de temperatura, movimiento de un objeto, fuerza que hace un muelle...
Química: la composición del agua mineral, la fermentación del vino, una manzana que se pudre...

Después les propongo un pequeño ejercicio en el que les doy fenómenos o cambios de la vida diaria y ellos han de indicar qué ciencia estudia dicho fenómeno: caída de un objeto, combustión de un papel, rotura de un papel, fusión del hielo, moimiento de un coche, análisis de una muestra, oxidación del hierro, cambiar de posición una silla.
Les suelo indicar que una forma de no equivocarse consiste en pensar si el objeto que experimenta el cambio transforma o no su naturaleza.

Luego comentamos los ejemplos. Es conveniente romper la monotonía, por lo que en el caso del papel, podemos coger el trozo de papel, romperlo, cambiarlo de posición, incluso quemarlo, para que así aprecien las diferencias entre un tipo u otro de transformación. Hay que tratar de explicar intentando que ellos sean partícipes, preguntándoles, mirándoles, evitando que desconecten, tratando en todo momento que el desarrollo de la clase sea como un hilo que no puede romperse. Resulta muy efectivo ir haciendo preguntas sobre todo a los que notas que han desconectado (se suele ver en su mirada).

Prácticamente con todo lo anterior se ocupa una sesión completa. En la parte final de la clase hago un breve resumen de los contenidos que vamos a ver a lo largo del curso, y también ubico la Física y la Química dentro de las Ciencias Naturales, haciéndoles ver que no es una asignatura nueva, sino que en 1º y 2º de la ESO también han estudiado Física y Química, pero dentro de una asignatura más global, junto a la Biología y la Geología. Suelo explicar esto con un esquema de los cursos y de los nombres de la asignatura, haciéndoles ver que cada curso que pasa los contenidos van especializándose y ampliándose cada vez más, hasta el extremo de que en 2º de Bachillerato la Física y la Química son asignaturas independientes, cuyo estudio les permitirá por una parte una mejor comprensión de todo lo que les rodea, y por otra una buena preparación a la hora de estudiar una carrera técnica. De esta forma podemos hacerles ver la utilidad de nuestra asignatura.

sábado, 18 de septiembre de 2010

Primera semana: sensaciones.

Los primeros días de clase siempre suponen un nuevo reto. Sin duda, la experiencia es un grado, pero por muchos años que lleves en el mundo de la enseñanza creo que es imposible abstraerse a esa sensación de desazón, esa inquietud interior que recorre nuestro cuerpo ante un nuevo curso.
El verano pasa lentamente, pero definitivamente, pasa. Y comienza un nuevo reto, difícil e ilusionante a la vez. Tienes ante ti un montón de incógnitas, ya que recibes a nuevos alumnos, cada uno con sus problemas, su vida, sus ilusiones... Es evidente que vas a ser al menos durante un año, una parte importante de sus vidas, de su formación académica, y también, cómo no, de su formación como personas.
La primera semana transcurre, y vas conociendo las clases. Notas ese gusanillo que te recorre mientras oyes el bullicio en el exterior. Esperas que entren y meditas las palabras ensayadas tantas veces a lo largo de estos años. Tu presentación, la explicación de las normas, las miradas, las sensaciones... ¿Quién me planteará más dificultades? ¿Quién será el mejor? ¿Y el peor? ¿Cómo podré engancharlos a la asignatura? ¿Cómo podré mantener la ilusión y no aburrirlos? Incognitas, preguntas, cuestiones... Es nuestro sino como formadores.
¿Dificultades? Muchísimas. A veces pienso en la administración educativa y la veo como una maquinaria fría e indolente ante los problemas que nos afectan. Os pongo un ejemplo: ¿cómo es posible que a fecha de hoy sigan las plantillas incompletas? En mi centro, por ejemplo, pese a los reiterados avisos hechos a la administración, faltan todavía cinco profesores, y las plazas todavía siguen sin cubrirse. Además, las perspectivas no son halagüeñas, ya que algunas son plazas a tiempo parcial y otras son difíciles de cubrir por diversos problemas administrativos generados por la propia conselleria. La situación: alumnos sin clase. Y lo que es peor: alumnos acostumbrados a no dar clase. La falta de seriedad sin duda repercute en ellos y resta credibilidad a nuestra propia labor.
Otras dificultades derivan de los recortes presupuestarios. En mi caso, por ejemplo, tras muchos años me he quedado sin la optativa de laboratorio de Física y Química, y mientras, se invierte dinero en fomentar la enseñanza del chino mandarín.
¿De esta forma pretendemos ser unos pioneros en ciencia? Es triste, de verdad.
¿La solución? Estereotipos y cortinas de humo: "los profesores viven bien", "no os quejéis, con tantas vacaciones", "hay que dar clases de repaso en julio", "los exámenes de septiembre los haremos en julio"... ¿Qué posibilidades tiene un alumno de aprobar en julio lo que no ha hecho a lo largo de todo el año? Absurdo, ¿verdad?
Cualquier cosa menos invertir más dinero en educación.
Pero no hay que ser negativo, ya que sé que soy un afortunado. Tengo trabajo, y además, mi trabajo me gusta. Así que mientras siga viendo esa chispa en los ojos de mis alumnos, esa ansia por saber y por sorprenderse ante la ciencia, esas ganas de aprender... Mientras eso suceda, ¡seguiré en la trinchera!

domingo, 5 de septiembre de 2010

Un nuevo curso

Hola a tod@s,
Como decía la canción del dúo dinámico, el final del verano llegó... Comienza un nuevo curso con sus nuevos retos, dificultades, ilusiones y esperanzas. Va a ser una año difícil por la gran cantidad de recortes que han aplicado a la enseñanza, sin ningún tipo de miramientos. Ello ha provocado que aquí en Valencia much@s compañer@s se queden en el paro a principio de curso (más de 1200).
He tenido el blog bastante abandonado, ya que he estado más de un mes sin escribir. Pero el calor me puede, y francamente no tenía ganas de hacer nada. Además he estado una semana de vacaciones por Galicia, con lo que afortunadamente me he librado de la ola de calor que ha barrido casi toda España.
Así que aquí me tenéis de nuevo, dispuesto a contaros cosas y a ayudaros en todo lo que esté en mi mano.
Tan sólo desearos mucha suerte para este nuevo año académico.
¡¡Un abrazo!!

¡¡¡Este brindis va por vosotr@s!!!